Las palabras de Ana despiertan la culpa de Florencia

Florencia es una adolescente que sus padres, Horacio (Jorge Enrique Abello) y Ana (Paola Turbay), no han sabido controlar, pues cada que decide hacer una rebeldía, son ellos los directamente afectados de sus decisiones. Para ella, la vida es de riesgos, quien junto a su novio Quique, ha decidido tomarlo de forma insegura.

Recordemos que Florencia y su novio estuvieron realizando su servicio social construyendo casas, idea propiciada por Ana y Joaquín (Sebastián Carvajal); no obstante, en el lugar deciden escaparse, generando miles de problemas a su alrededor, entre ellos que casi fueran robados por unos delincuentes del lugar, los cuales fueron ahuyentados por la llegada a tiempo de Joaquín. Esto trajo problemas para Quique pues se encontraba consumiendo sustancias ilegales, que el mismo periodista denunció.

Joaquín despierta el odio en Florencia y Quique

El periodista denuncia a los adolescentes en la rectoría del colegio, ocasionando que este les impartiera un castigo a los adolescentes, despertando el odio de los dos. Ante eso Florencia aprovecha que Joaquín no ha botado el cheque, para tomarlo y amenazarlo con denunciarlo, pero esa idea se pierde cuando Quique falsifica la firma de Joaquín y cobra el cheque.

En el banco, las cosas no salen como las espera Quique, pues cuando cobra el cheque, le piden algunos documentos que él no tiene, generando que el banco llame a corroborar el cobro, situación de la que se entera a Ana, muy decepcionada.

Florencia ocasiona la pelea de Joaquín y Ana

La desconfianza de Ana aumentó al punto de reclamarle a Joaquín, quien se defiende y manifiesta que buscará justicia. Las palabras del periodista quedan en la mente de Ana, pero se niega a aceptar su inocencia.

Decepcionada y triste, Ana habla con Florencia y le pide disculpas por todo lo que su relación con Joaquín ha ocasionado, pues ella creyó en el hombre. Esas palabras generan el dolor de su hija, pues siente culpa de la tristeza de su madre, aunque se niega a aceptar la verdad, por lo que sigue ocultándola.