Dejémonos de Vargas | Capítulo 55 | ¿Valentina es mamá tóxica?
La madre de Agustín Julio no soporta que su hijo esté cambiando y saliendo con su compañera de estudio.
Agustín empieza a salir con Mariana y antes de salir de la casa el jovencito se ve con una pinta particular y se despide de sus padres como nunca antes lo había hecho. De hecho, el adolescente les cuenta que se compró toda esta pinta con la tarjeta de crédito de su compañera, cosa que toma a sus padres por sorpresa.
Lucy va a visitar a Miranda a su casa en un sector humilde, el hombre recibe a la distinguida señora en pantaloneta y en una pinta particular. Ella siente que los pensamientos salen de su cabeza y terminan bailando tango y en un romántico plan.
Camila siente que está libre de peligros y entrena con toda la fuerza que tiene, su parcero caleño sigue protegiéndola y ella lo cuida con un tatuaje que se hizo. Pero el malvado corrupto que habían desenmascarado vuelve a buscarla para hacerle daño, pero su amigo la defiende una vez más.
A Ramón le dan una oficina decente en su trabajo y él llama a Valentina para contarle, de hecho, le hace una propuesta indecente. Agustín sale a cine con Mariana y lleva su consola y su portátil para alquilarlo a un compañero y así tener dinero para descrestar a la jovencita.
El joven llega con un peluche grande a la sala y ella dice que le da pena, el joven responde los continuos mensajes de su mamá. Valentina busca en el cuarto de Agustín y les pide ayuda a Jennifer y Alejandra para averiguar la vida y datos de la familia de Mariana.
Finalmente, la cita de Agustín no termina como él imagina y la adolescente le cuenta a su compañero que alguien al parecer quería extorsionar a su familia y que averiguarán quién hizo extrañas llamadas a la casa.