Valentina se reencuentra con su mamá, después de tener muchos inconvenientes con ella
No todo es perfecto en la vida de Valentina, pues la relación con uno de los seres que le dio la vida no es la mejor.
Además de ser esposa y madre, Valentina (Margarita Muñoz) es abogada y dueña de una fundación. Detrás de la fortaleza que la acoge, existe una historia de vida fuerte, teniendo en cuenta la mala relación con algunos miembros de su familia.
Valentina y su mamá Catalina
En el capítulo 64 de 'Dejémonos de Vargas', la tía Lucy le comenta a Valentina que su madre está interesada en volverla a ver, pues necesita hablar con ella.
Al principio, esta se mostró reacia a la idea de charlar con su madre, pues tiene como recuerdo latente el hecho de que ni siquiera asistió a su matrimonio con Ramón Vargas, sujeto que no le parece: "digno para su hija".
Sin embargo, al charlar con su amiga Alejandra, Valentina entendió que para perdonar, necesita escuchar la versión de los hechos de la otra persona, sin juzgar ni odiar.
Valentina habla con su mamá
En el restaurante al que fueron citadas, Catalina, progenitora de Valentina, le preguntó acerca de cómo se encontraba en la actualidad. Por supuesto, con respuesta tajante, la señora de Vargas confesó, sentía era algo tarde para mostrar interés en ella.
Y lo que te voy a decir no es excusa, solo hasta ahora pude venir a hablarte porque antes no era posible, no estaba preparada, emitió Catalina.
Adicionalmente, Catalina demostró su interés en conocer a su nieto, Agustín Julio, un niño: "bastante especial", según comentó.
Durante la conmovedora escena, Valentina ratificó que ella, en su rol de madre, no sería capaz de abandonar a un hijo, así como lo hizo ella. Después de intercambiar palabras, Catalina quiso volver a empezar de cero con los Vargas Restrepo; es claro que se ha perdido la oportunidad de conocer la bondad de sus corazones.