Dejémonos de Vargas | Capítulo 70 | Nuevos caminos arriban
Mientras Valentina desea ser política, Yennifer encuentra una particular manera de llamar la atención.
Teniendo en cuenta los problemas con su fundación, Valentina toma la decisión de lanzarse al Concejo, no sin antes preguntarle a Ramón y Agustín Julio sobre la idea; ambos tienen sus dudas.
Por otra parte, Camila se encuentra en un dilema profesional, ya que desea seguir jugando fútbol, sin embargo, el tema de su lesión se lo impide. A la par de su mala actitud, Mireya le pide que agradezca es alguien afortunada por tenerlo todo.
Tía Lucy y Samuel viven un romántico momento en la academia de Mireya, hecho que es descubierto por Ramón cuando visitó a Camila.
Para potenciar la carrera artística de Yennifer, Agustín Julio tuvo una brillante idea: decir que su papá, Ramón, es su: "sugar daddy". Valentina se enfurece, advirtiéndole a Yennifer que deberá escoger entre su otra pasión o el trabajo en la casa de los Vargas Restrepo.
Ramón cae en una manera particular de trabajar, fingiendo ser quien no es por medio del teléfono.
Teniendo en cuenta el nuevo hobbie de Yennifer, Rosa, una buena conocida de la joven, llegará a hacer las labores del hogar cuando esta se encuentre ausente. Lo que molesta a la familia es su personalidad, bastante autoritaria a decir verdad.
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