Luces Velásquez habló acerca de cómo afrontó la pérdida de sus hijos

Luces Velásquez es una de las actrices más reconocidas de la televisión colombiana. Su papel de “Bertha”, en “Yo soy Betty, la fea”, se quedó grabado en la memoria de todo el país.

Esta actriz, siempre se ha dejado ver como una mujer muy alegre, muy parecida a lo que veíamos en Betty, sin embargo, detrás de esa sonrisa y esa espontaneidad, se esconden situaciones difíciles que ha tenido que afrontar a lo largo de su vida.

Luces, quien es madre de Oriana, tuvo que vivir la pérdida de tres hijos, antes de la llegada de su hija menor.

Mientras vivía en Brasil, acompañando a su esposo, quien estudiaba una especialización de medicina, Luces quedó embarazada, sin embargo, en el séptimo mes se enteró que su hijo tendría un problema cardiaco poco común, mismo que le arrebató la vida, un mes después de haber nacido.

Posteriormente, también en Brasil, hubo una virosis muy fuerte que golpeó su embarazo en el octavo mes, esto hizo que su bebé enfermara y, antes de nacer, ya hubiera perdido la vida.

El último de estos tristes episodios, se dio cuando estaba grabando Betty. Estaba en Santa Marta, y su bebé también murió.

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Tras esta última tristeza, ella estaba decidida a no tener un hijo natural. Le hizo saber esta decisión a su ginecólogo, quien le dijo que debían hacerle unos exámenes; y fue ahí donde supo que estaba embarazada por cuarta vez, esta, la definitiva.

De este embarazo no le contó nada a nadie, a excepción de Fernando Gaitán, pero en el quinto mes tuvo que hacer pública la noticia porque su personaje iba a enfrentarse a una liposucción.

Tras nacer, Oriana empezó a aparecer en Betty porque durante el día se grababa lo que se veía en la noche, y Gaitán le pidió que prestara a su hija para que hiciera parte de la producción.

Sobre estas difíciles situaciones, Luces asegura que “las pérdidas son muy dolorosas. Uno cree que la única que sufre es la mamá, pero el papá también lo vive”.

Y cierra dejando un mensaje esperanzador a todas aquellas mujeres que no han podido ser madres: “Hay que digerir eso, hay que hablarlo, hay que llorar si es necesario. Si no se puede de forma natural, se puede adoptar”. 

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