Capítulo 31 de enero – Soledad cambió de opinión por el amor de Jaime
Jaime es sorprendido por Soledad en la Universidad, donde ella le dice que no se fue por él y pues él se ha convertido en una persona muy importante para ella, y gracias a sus palabras decidió quedarse.
Graciela le tiene una fiesta sorpresa de grado a Jaime, pero éste decide ir a buscar a Soledad primero, diciéndole mentiras para poder escaparse un rato y buscar explicaciones en casa de Soledad, pues, después de la conversación que tuvieron en la ceremonia de grado, Jaime (Sebastián Gutiérrez) sigue muy pensativo por las palabras de Soledad (Cecilia Navia) y decide ir a buscarla para que le explique porqué se está despidiendo. Al llegar a la casa, Soledad no duda en contarle que se irá a defender sus ideales, por lo que el joven muy triste le reclama y le dice que, si no le parece suficiente todo lo que ya han perdido, para seguir exponiéndose de esa manera, pero ella sigue firme en su decisión.
Jaime se va muy triste por no poderla detener, llega a su casa y se encuentra con la fiesta sorpresa, tratando de ser cordial con todos sus familiares, ocultando la tristeza que siente por la decisión que tomó Soledad. Durante la fiesta, Cravis se escapa para llevarle comida al celador, Graciela sospecha que algo está tramando, pero no la detiene.
Entre tanto, Soledad se da cuenta de que su mamá encontró la maleta que ella estaba preparando, y tratando de que no se preocupe por lo que va a pasar, le dice que encontró una muy buena opción laboral en una ciudad muy lejana, por lo que decidió irse sin contarle a don Ramón (Ernesto Benjumea) de sus planes.
Jaime escucha la noticia de que fueron capturados algunos estudiantes que iban para el monte, pensando de inmediato en Soledad, por lo que sale desesperado a buscarla. Cuando llega a casa de Soledad, Gabriela le corrobora que se ha ido. Cravis sigue pretendiendo al portero del barrio, sin embargo, este apenas se da cuenta que es una persona especial empieza a rechazarla y ella se da cuenta por lo que llega despechada a casa.
Finalmente, Soledad le dice a Jaime que deben mantener todo en el anonimato para que nadie los juzgue, a lo que el joven normalista le acepta las condiciones, pues solo quiere estar con ella. Soledad le dice a Gabriela que nunca más se va a ir de la casa, aunque ella ya no confía en las palabras de su hija.