Rafael sueña con casarse con Alejandra Maldonado

En la fiesta de despedida de Marino (Julián Arango), Rafael (Sebastián Martínez) volvió a preguntarle a su jefe por su relación con Luciano (Gregorio Pernía) y la cadenita que le regaló antes de su viaje fuera del país.

Aunque Rafael le contó toda la verdad a Alejandra (Carmen Villalobos), ella no fue capaz de responder a sus preguntas con toda sinceridad. Por lo que, cuando llegaron los mariachis, Rafael no dudó en expresar sus sentimientos cantando y Alejandra le respondió.

La gerente comercial de Ramenautos, en sus trovas, le dejó claro a Rafael que su relación amorosa no podía ser. Cuando Don Gastón enfrentó a Rafael por lo que escuchó en los cantos, Méndez se asustó y le dijo que todo era parte del show de despedida.

Pardo no le creyó y le preguntó, además, por el matrimonio con su hija. Rafael no pudo decirle que la boda se había cancelado y, para evitar un disgusto, manifestó, en cambio, que Alejandra no tenía nada con él porque era su jefe y también estaba comprometida.

Luego, Luciano llegó al lugar y Alejandra le dio una nueva oportunidad. “Somos novios”, dijo Maldonado. Luciano no lo podía creer, pues después de tanto rogar, logró que Alejandra volviera con él. El abogado aprovecharse para besar a su novio frente a Rafael y todos los asesores comerciales de Ramenautos.

Rafael terminó en el cuarto de Vicky, un poco pasado de tragos, y no logró sacarse de su cabeza a Alejandra, tanto así que terminó soñando que estaba con ella en un cuarto disfrutando las mieles del amor y hablando acerca de su matrimonio. Sólo un feliz sueño, pues Alejandra y Rafael siguen peleados y pensando en que su amor es imposible.  

Además, Rafael amaneció en la cama de Vicky y cree que le quitó la “virtud” a la pajarita, pues no recuerda nada de lo que pasó.