Jesús | Capítulo 83 | Jesús llora en el monte de los Olivos
En una noche llena de sombras, Jesús aprovecha para preparar a sus discípulos para la hora de su entrega.
Jesús lleva a sus discípulos al huerto y allí junto a ellos hace una oración en donde se despide de cada uno, pues la hora de su entrega está cerca.
Con lágrimas, cada uno de sus apóstoles siente en su corazón la despedida de su maestro y éste a su vez les enseña el mandamiento del amor, una enseñanza que cala en cada uno de sus corazones.
Además habla de lo que le espera y que en esos momentos de aprehensión del maestro todos se esconderán y lo abandonarán, no obstante también les dice que tendrá que morir para resucitar como está escrito.
Sumado a esto, Jesús sabe que el cáliz que tiene que tomar está escrito, pero le pide a Dios, si es posible que le permita pasar ese trago. Le recuerda además a Pedro que lo negará esa misma noche y antes que el gallo cante tres veces esta escritura se cumplirá.
Judas vende al mesías y empieza a sentir remordimiento, ese mismo lo llevará a tomar una decisión pues no aguanta ser el traidor.
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