La rosa de Guadalupe | Capítulo 230 | La mala persona del cuento
Ana será el recuerdo ejemplar de sus hijas.
Esteban llevaba varios años de matrimonio con Ana y tenían dos hijas llamadas: Sharon y Malena. La relación de ellos no era la mejor, pues él escondía algo que no quería decir.
Ana empezó a recibir mensajes de texto por parte de un número desconocido donde le decían que su marido tenía una amante y que él la engañaba.
A raíz de la desilusión y la falta de atención de Esteban, Ana cada vez se sentía más abatida por la actitud de su esposo.
Con el paso de los días, Esteban tomó la decisión de que sus hijas estuvieran unas semanas con sus padres. Todo esto, debido a que quería que Ana estuviera lejos ellas.
Malena tenía un fuerte comportamiento con su madre y era indiferente. Sharon, a diferencia de su hermana, siempre fue amorosa y cariñosa con Ana.
Olga, madre de Ana, le aconsejó a su hija que acudiera a terapia, como consecuencia de la soledad y constantes discusiones que tenía en su relación, pero Ana no accedió.
En vista de que Esteban era duro con Ana, más adelante ocurrirá un hecho del cual se arrepentirá y hará lo posible para que no lo descubran.
Mientras que Ana tomará riendas en el asunto, descubrirá un inesperado suceso que Esteban cometió con su esposa. Su arrepentimiento hará que su familia abra los ojos frente a lo que él ocultó.