La rosa de Guadalupe | Capítulo 467 | La fuga
Aíra despierta la envidia de todos por su inmenso talento, aunque su vida no es perfecta, debido al odio y desprecio de su madre.
Aíra es una amante de las porras a la que todos ven como una chica soberbia y engreída, pero es todo lo contrario, pues su único deseo es ser feliz con su novio y ganarse el cariño de su madre, aunque ella la desprecia, debido a su gran parecido físico con su padre, quien la abandonó.
La chica no soporta más la situación y busca auxilio en su pareja, Rodolfo. Él le propone escapar de sus casas y vivir juntos sin las irrupciones y molestias de sus padres, así que un día desaparecen de la escuela.
No obstante, la maestra, Dulce, duda de lo ocurrido, ya que los adolescentes huyeron sin sus pertenencias, por consiguiente, comienza a buscar pistas de su paradero junto a los padres de Rodolfo, asimismo el odio y el rencor de la madre de Aíra aumenta exponencialmente.
Con el correr de los días, Dulce sospecha de Feliciana, su alumna, quien siempre sentía celos de Aíra no sólo por sus destrezas, sino también haberse ganado el amor de Rodolfo. La desconfianza de la profesora resulta ser acertada, puesto que su alumna encerró a los chicos en el sótano de la escuela sin comida y sin bebida.
La policía arresta a Feliciana y llevan rápidamente a los dos muchachos al hospital. Tras su recuperación, Aíra se reconcilia con su madre, además le pide perdón por haber descargado toda ira en ella, dado que no quiere perder a su hija y aspira formar una verdadera familia.