La rosa de Guadalupe | Capítulo 557 | En cada niño
Mayra intenta adoptar a un niño que le recuerda a su hijo perdido, pero sus actitudes son posesivas y sobrepasan todo tipo de límites.
Mayra está felizmente casada con Horacio, un hombre comprensivo y amoroso que vela por el bienestar de su esposa, además conforman una hermosa familia junto a Lalito, su hijo.
No obstante, su bella existencia se esfuma tras la desaparición del niño y la conciencia de la mujer no soporta tal noticia, asimismo su cordura se deteriora con el correr de los días.
Durante 5 años, Mayra no ha dejado de buscar a Lalito y Horacio se ha mantenido junto a ella sin importar los múltiples ataques de ansiedad presentados en las noches.
Ella intenta despejar su mente al recorrer las calles de la ciudad y para su fortuna conoce a un niño lleno de esperanza e ilusiones, así que decide llenar el vacío de su alma gracias la inocencia del joven.
Toñito siente una felicidad inmensa al obtener una madre adoptiva, a pesar de ello, Horacio no ve con buenos ojos el extraño interés de su cónyuge y le pide frenar sus actitudes posesivas.
Mayra le afirma que Toñito es en realidad Lalito, por tal motivo roba un cabello de su nueva adoración y paga una prueba de paternidad sin el consentimiento de la verdadera tutora.
Horacio cansado de la situación le revela toda la realidad y le hace entender que su adorada creación murió la misma fecha de su desaparición, pues las empleadas fueron las responsables del atroz acto.
Ellas buscaban venganza de los maltratos y abusos de su jefa, por consiguiente, hicieron pagar a un inocente en pro de saciar su terrible sed de venganza.