La rosa de Guadalupe | Capítulo 893 | Raymundo y la búsqueda de justicia

Raymundo es un maestro ejemplar y sus colegas admiran su pasión por la enseñanza. Su esposa también aplaude el gran padre que es. No obstante, una alumna, Doris, empieza a llevarle regalos, lo cual lo incomoda. Él le asegura que no es correcto que intente coquetear con él.

Raymundo visita a sus sobrinas, y allí la madre de las pequeñas le pide que no se acerque a ellas. En la escuela, Raymundo enfrenta una terrible situación cuando, por una confusión, la madre de Luz cree que él se sobrepasó. La directora recibe una advertencia por esta situación. Doris aprovecha la oportunidad de lo que está sucediendo para vengarse de Raymundo por no haberle prestado atención.

Raymundo es denunciado por los padres de Doris y de Luz. La situación se complica aún más cuando la hermana de Lina, la esposa de Raymundo, la convence de que él no es un buen hombre. Luego de esto, Lina le pide el divorcio tras las acusaciones.

Tras la compleja situación, Raymundo se propone limpiar su nombre, principalmente ante su familia. Diez años después, mientras intenta sobrevivir en las calles, le pide a la Virgen de Guadalupe que lo ayude a recuperar su prestigio y buen nombre luego de las acusaciones injustas.

Raymundo se encuentra con Doris y la cuestiona por haberlo acusado injustamente. Ella le pide perdón, asegurándole que no ha vivido tranquila desde lo sucedido. Él, sin rencor, acepta su perdón. Doris intenta reivindicarse confesando la verdad a sus padres, a la directora y a los padres de Luz, revelando que Raymundo siempre fue muy respetuoso.

La última en enterarse es Lina, quien se cuestiona haberlo acusado injustamente. Todos piden perdón a Raymundo por las acusaciones injustas, y aunque él asegura que no les guarda rencor, le dice a su esposa Lina que ya no la ama.