La rosa de Guadalupe | Capítulo 439 | Pintar de colores un mundo gris
A Rodrigo le cuesta mucho aprender a leer y escribir y no recibe el mejor apoyo de parte de su familia, excepto de su abuela.
Rodrigo la pasa mal en la escuela; no logra aprender a leer ni a escribir y su profesor cree que lo mejor que pueden hacer es sacarlo del colegio.
En casa, Rodrigo la pasa aún peor; sus papás no entienden lo que le ocurre y, en cambio, si lo castigan fuertemente.
Rodrigo solo recibe el apoyo de su abuela y ella intercede para que Silverio no descargue su furia contra él; trata de entender qué le está pasando y le pide ayuda a la Virgen de Guadalupe.
Rodrigo se pierde y dura dos días alejado de su casa, hasta que su hermano lo encuentra. El niño pasa por una situación complicada a raíz de un fuerte golpe que sufre en la cabeza, pero su papá sigue empecinado en juzgarlo.
Su abuela, al fin, descubre que Rodrigo sufre de un trastorno llamado dislexia, el cual le impide aprender normalmente. El menor empieza un tratamiento y logra superar sus miedos, pero a la vez desarrolla de forma extraordinaria el talento para la pintura.
Rodrigo gana un concurso de pintura y se vuelve un verdadero experto en la materia. Su papá le pide perdón y al fin la alegría y la paz llega a la familia Martínez.
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