La rosa de Guadalupe | Capítulo 690 | Amigos de verdad
Una madre deberá enfrentar al mundo que quiere apartarla de su nueva hija.
La inocencia Irene le hace conocer a Brisa en un parque, quien la invita a su casa a conocer a su perrito y se van en compañía de la madre de Brisa, desconociendo el peligro al que se enfrenta y que, lamentablemente, no volverá a ver a su familia, pues la cruel mujer tiene plan malévolo donde Brisa, su propia hija, inocentemente consigue “amigas” que pasarán a ser víctimas de tráfico.
Por otra parte, Eliza es hija de Gonzalo y Marcela una pareja que han criado a su hija con mucho amor y que, sin esperarlo, perderán a su pequeña de la misma forma en que Irene desapareció. Gracias a la denuncia de los padres y un operativo, la red es desmantelada y cientos de niños finalmente vuelven con sus padres, todos, a excepción de una pequeña: Eliza.
La investigación de la policía logró dar lo pareja que tenía a Eliza y que, sin dudarlo, le arrebataron la vida a la pequeña, dejando a unos padres supremamente dolidos y en hueco de depresión. Muy confundida, Marcela se entera del lamentable final que le espera a Brisa a causa de su madre, por lo que, sin consultarlo con Gonzalo, decide adoptara a la pequeña y volverla su hija.
Aunque la vida Marcela y Brisa se llena de esperanza otra vez, las cosas no son fáciles, pues la negativa de su esposo y los padres de Marcela y, junto con las agresiones que sufre Brisa por las amigas de Eliza, dejan muchos sentimientos encontrados en ambas. Lleno de furia, Gonzalo toma la errónea decisión de devolver a Brisa al centro gubernamental donde estaba en un principio, pero el amor de Marcela pudo más y fue a salvar a su Brisa, dejando en claro que está dispuesta a pelar con todos y por todos con tal de no perder a otra hija.
Gonzalo entra en razón y entiende el sentimiento de su esposa, pues a pesar del dolor de haber perdido a Eliza, el dolido padre no desea perder a su esposa y causarle más dolor a Brisa, por lo que decide seguir con la adopción y forma una nueva familia con Brisa y su esposa, Marcela. Por fin Brisa tiene, no solo unos padres que la aman, sino mejores amigos para toda su vida.
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