Capítulo 21 de enero – | La felicidad volvió a la familia Sinisterra ¿Quién mató a Patricia Soler?

Lucía (José Daniel Cristancho), y Camilo descubren las intenciones de Ricardo de querer asesinar a Sara, pues este compró ropa en un almacén de mujer para continuar con su venganza.

Pero Sebastián (Miguel de Miguel) es más astuto que él y logra conseguirlo, lo enfrenta, y luego de unas fuertes palabras, Ricardo se lo lleva al lugar donde también tiene prisionera a Sara.

Pero antes de llevárselo, Sebastián hace una estrategia que le permite a sus hijos saber a dónde lo lleva Ricardo, ya que él no cumple su palabra de entregarle a Sara a cambio de una millonaria suma de dinero.

Camilo y Lucía llegan a la cabaña para salvar a sus padres, pero Ricardo vuelve y no pierde tiempo en accionar el arma que le da un balazo letal a Sara.

Al tiempo llega la policía y se enfrenta a Ricardo que es gravemente herido de bala y capturado.

Sara, Sebastián y sus hijos logran superar esas dificultades que vuelven a unirse como familia y al tiempo, recompensarle a quienes le ayudaron a conseguir tanta felicidad.

Pablo y Lucía se reúnen para hablar de su futuro y de ese amor que también superó barreras y mucho odio. Lucía permite que Pablo que se vaya del país solo porque no quiere separarse de su madre, pero lo hace con la promesa de que se volverán a ver y seguirán siendo felices.

Diego le hace una emotiva propuesta de matrimonio a Jimena y ella no duda en decirle que sí, y esta noticia es la alegría de la familia.

Camilo, viendo que el amor es parte de su familia nuevamente, se arriesga y le pide a Vivían que se vuelvan a casar y lo intenten de nuevo por el bien de su hijo, pero ella está negada a olvidar lo que él le hizo.

Sin embargo, el amor se hace noble en la adversidad, y así, Vivían decide dar el paso en nombre del amor que siente por Camilo y junto a Diego y Jimena realizan una boda doblemente hermosa.

El día llegó y todos disfrutaron de esa felicidad que se merecían. La felicidad volvió a la familia Sinesterra.

Lucía y Camilo descubren las intenciones de Ricardo de querer asesinar a Sara, pues este compró ropa en un almacén de mujer para continuar con su venganza.

Pero Sebastián es más astuto que él y logra conseguirlo, lo enfrenta, y luego de unas fuertes palabras, Ricardo se lo lleva al lugar donde también tiene prisionera a Sara.

Pero antes de llevárselo, Sebastián hace una estrategia que le permite a sus hijos saber a dónde lo lleva Ricardo, ya que él no cumple su palabra de entregarle a Sara a cambio de una millonaria suma de dinero.

Camilo y Lucía llegan a la cabaña para salvar a sus padres, pero Ricardo vuelve y no pierde tiempo en accionar el arma que le da un balazo letal a Sara.

Al tiempo llega la policía y se enfrenta a Ricardo que es gravemente herido de bala y capturado.

Sara, Sebastián y sus hijos logran superar esas dificultades que vuelven a unirse como familia y al tiempo, recompensarle a quienes le ayudaron a conseguir tanta felicidad.

Pablo y Lucía se reúnen para hablar de su futuro y de ese amor que también superó barreras y mucho odio. Lucía permite que Pablo que se vaya del país solo porque no quiere separarse de su madre, pero lo hace con la promesa de que se volverán a ver y seguirán siendo felices.

Diego le hace una emotiva propuesta de matrimonio a Jimena y ella no duda en decirle que sí, y esta noticia es la alegría de la familia.

Camilo, viendo que el amor es parte de su familia nuevamente, se arriesga y le pide a Vivían que se vuelvan a casar y lo intenten de nuevo por el bien de su hijo, pero ella está negada a olvidar lo que él le hizo.

Sin embargo, el amor se hace noble en la adversidad, y así, Vivían decide dar el paso en nombre del amor que siente por Camilo y junto a Diego y Jimena realizan una boda doblemente hermosa.

El día llegó y todos disfrutaron de esa felicidad que se merecían. La felicidad volvió a la familia Sinesterra.