Café: Gaviota consigue trabajo, pero no le va tan bien
La Gaviota logró obtener un nuevo empleo, pero en su primer día se llevó una no tan agradable sorpresa.
Gaviota (Margarita Rosa de Francisco) recibe una llamada donde le confirman que quedó seleccionada para el trabajo al que aplicó de ventas de enciclopedias.
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Emocionada le cuenta a su mamá y ella tampoco oculta su felicidad por la noticia.
Más tarde, va al trabajo y firma contrato para comenzar de inmediato.
Su jefe le pregunta si tiene carro y ella le confiesa que le tocó venderlo. Este le dice que la empresa es bastante generosa y que pronto podría tener uno, por lo que, ella aprovecha para preguntarle sobre si le podría dar un adelanto, pero él le dice que es muy apresurado para pedirle eso.
Ella da inicio a su trabajo, recibiendo un curso y tomando acción.
Hace varias llamadas a personas en una base de datos de posibles compradores, pero estos no le responden como ella esperaba.
El jefe llega a decirle que ya puede terminar de trabajar, que no se afane que es hora de salida y que poco a poco irá aprendiendo y podrá mejorar sus ventas.
Le señaló que hay varias técnicas que se aprenden en el camino para lograr los objetivos.
Gaviota lo cuestionó sobre qué técnica tenía que aprender y este le comentó que se las podía decir si cenaban juntos en un restaurante.
Él comenzó a coquetearle y Gaviota al darse cuenta dejó que se fuera por su chaqueta para salir juntos y se adelantó y se fue corriendo.
Al llegar a su casa comenzó a decirle a su mamá que por qué Dios había inventado a los hombres.
“Imagínese usted si Dios nos hubiera dado la oportunidad de maneja este mundo a nosotras, qué tal lo que sería, un paraíso, un jardín, porque nosotras sí lo cuidaríamos, pero no, a este se le dio por inventar esos rufianes para que lo destruyeran todo”, dijo.