La Liendra confiesa que no dará regalos en su familia si no se los merecen
El influencer explicó que él soporta económicamente a sus sobrinas y que por eso tiene derecho de exigirles.
El famoso creador de contenido cafetero conocido como La Liendra suele explicarles a sus seguidores los objetos que suele comprar con su dinero y las buenas acciones que suele hacer con éste.
En esta oportunidad explicó que, aunque le da mucha felicidad dar obsequios a las personas que quiere, aprendió que debe darles a quienes se lo hayan ganado.
También te puede interesar: Luisa Fernanda W impresiona con versiones ilustradas de su cuerpo y rostro.
En las historias de su cuenta de Instagram con más de 6 millones 300 mil seguidores, el famoso influencer contó que su mamá cuida a sus tres sobrinas, pero que es él quien las soporta económicamente, por lo que tiene el derecho de decidir si les cumple o no con la carta de deseos navideños.
“A mí me encanta diciembre porque yo soy esa típica persona que le encanta darle regalos a su familia y trabajo y tengo con qué gracias a Dios, pero hace dos años aprendí que algo es dar por dar y algo es dar porque se lo merezcan. Entonces, aunque yo tenga para darles regalo a ellos, si no se lo merecen, no les doy nada ya” expresó el famoso colombiano.
Teniendo en cuenta ese pensamiento para dar regalos en navidad, La Liendra explicó cuáles serían las condiciones para sus sobrinas y sus hermanas que, aunque quiera mucho, también quiere exigirles un buen comportamiento.
“Ahorita entonces llego a la casa de mi familia y mis tres sobrinitas, desde la más pequeña hasta la más grande, me tienen que mostrar el boletín en una buena posición, con el año ganado y mi mamá me tiene que decir que tienen muy buen respeto con ella para hacerles realidad esa cartica de niño Dios, si no, no merecen nada así yo tenga con qué darles. Igual mis hermanas, si se portaron bien, respeta a mi mamá, si no y son groseras, no hay nada pa’ ustedes”.
Finalmente, La Liendra dio un ejemplo de cómo reprendió a una de sus sobrinas que una vez no pasó el año, pues la dejó sin mesada y sin celular por tres meses y no se la llevó de vacaciones como a las demás.