La razón por la que Marcela Reyes no disfrutó la sorpresa de su esposo

La Dj antioqueña Marcela Reyes conforma junto al cantante de música urbana B King uno de las relaciones más estables del país cafetero, donde, aunque en comienzo muchos no apostaban por ellos, han demostrado que su amor es más fuerte que cualquier comentario negativo que hubieran podido recibir.

Con el pasar de los años, la pareja se ha ido consolidando como una de las más estables y ejemplares de la farándula nacional y por ende, apostaron, por disfrutar en absoluta reserva los detalles de su relación. Tanto así, que en diferentes ocasiones han hecho pensar que ya no están juntos por la ausencia de contenidos públicos

Marcela Reyes mostró por qué no pudo disfrutar de la romántica sorpresa de su esposo

Para la sorpresa de muchos, la dj aprovechó su ráfaga historias para compartir públicamente la romántica sorpresa que le había organizado su pareja en el marco de su viaje a la playa. Se trata de un romántico ‘Brunch’ privado que constaba de deliciosas opciones de comida, pasabocas y bebidas, sobre una decoración muy romántica.

Por lástima, esta sorpresa no pudo disfrutarla como hubiese querido debido al guayabo que estaba enfrentando por el vodka que había consumido en la jornada anterior.

“Si supieran que esta sorpresa tan linda no la pude disfrutar, el guayabo me estaba acabando”, fueron las palabras que expresó la Dj en su historia de Instagram mientras mostraba el bonito gesto que tuvo su esposo y el malestar que estaba viviendo ella al borde de la piscina.

Marcela Reyes le dedicó amoroso mensaje a su esposo

Más allá de su malestar, la también creadora de contenido no dejó pasar por alto el gesto que tuvo su pareja y aprovechó una foto junto a él para agradecerle por los días tan felices que habían compartido juntos y, sobre todo, por recordarle las razones que le habían motivado a tomar la decisión de ser su esposa.

Minutos más tarde, fue el propio B King quien se apoderó de las redes sociales de Marcela para mostrarle a los internautas como avanzaba el guayabo de su mujer, que mareada y con náuseas confesó que no tenía ni idea de cómo iba regresar a su casa porque sin exagerar, estaba viviendo de lejos el peor guayabo de su vida.