Yeferson Cossio se tatuó el rostro del perro que tiene junto a Jenn Muriel
Aunque los influenciadores no tienen ningún tipo de contacto, sí tienen varias mascotas en común, entre esos su perro Ricardito.
El creador de contenido Yeferson Cossio se ha caracterizado a lo largo de los años, no solo por el contenido que crea, en donde las bromas pesadas a sus familiares y amigos cercanos son las protagonistas, sino también, por el gran amor que siente hacia los animales, en especial por los perritos.
De hecho, vale la pena destacar que el influenciador paisa cuenta en la actualidad con la compañía de varios perritos que viven junto a él en su casa en Guatapé, varios de ellos adoptados junto a su expareja Jenn Muriel, con quien tuvo aproximadamente diez años de relación sentimental.
Sin embargo, cuando su noviazgo llegó a su fin ambos decidieron con qué perritos debía quedarse cada uno, en especial porque Cossio tenía su viaje programado hacia Japón en aquel momento.
Y es que quienes siguen de cerca la vida de ambos influenciadores han podido confirmar que el amor hacia los animales es una de las tantas cualidades que la pareja comparte desde siempre, pues ambos han sido responsables de diversas campañas de esterilización para controlar la sobrepoblación en zonas criticas de nuestro país.
Yeferson Cossio se tatuó el rostro del perro que tiene junto a Jenn Muriel
De esta manera, y pese a ya no vivir con el perrito, ya que Jenn Muriel fue quien quedó a cargo de él desde que decidieron poner fin a su relación sentimental, Cossio decidió rendir homenaje a Ricardito para demostrar su amor por él al tatuarse su rostro en su brazo izquierdo, así lo envidenció por medio de las historias de su cuenta oficial de Instagram, en donde acumula más de diez millones de seguidores.
“@Koryangarita usted ya es otro nivel tatuando. ¿Qué tal me quedó Ricardito? (Emoji enamorado)”, preguntó el influenciador a sus cientos de seguidores.
Los planes que Yeferson Cossio y Jenn Muriel tenían para Ricardito
Poco después de finalizar su relación, la pareja, quienes aún seguían en contacto, decidió llevar a cabo un proyecto digital en el que Ricardito sería el protagonista.
Este proyecto consistía en la creación de una cuenta de Instagram bajo el nombre del canino para recaudar dinero con publicidad que posteriormente estaría dirigido para causas benéficas. Sin embargo, al parecer este nunca se llevó a cabo.