Encuentran sin vida a la esposa del cantante James Morrison en su residencia
Presuntamente la esposa de 45 años del artista británico, estaba enfrentando problemas de salud en los últimos años.
El reconocido cantante James Morrison recibió una devastadora noticia en los últimos días, su esposa, Gill Catchpole, fue encontrada sin vida en su residencia de Whitminster, Gloucestershire, en el Reino Unido. Según fuentes internacionales, fue el propio Morrison quien hizo el terrible hallazgo el pasado viernes 5 de enero. Aunque aún no se ha determinado oficialmente la causa de la muerte, las declaraciones del forense y del patólogo que llevan el caso sugieren que podría tratarse de un caso de ahorcamiento.
James Morrison y la trágica noticia de su esposa Gill Catchpole
Presuntamente Gill Catchpole, de 45 años, estaba enfrentando problemas de salud en los últimos años. La mujer se había sometido a un trasplante de riñón que, si bien le salvó la vida, le dejó secuelas considerables. Sin embargo, según personas cercanas a la familia, tenía grandes planes para el nuevo año y recientemente había emprendido un negocio de catering.
Días antes de la trágica noticia, la policía de Whitminster recibió una llamada señalada cómo "preocupación por su bienestar". Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de los paramédicos, Catchpole fue declarada muerta a las 9:37 horas.
La vida de James Morrison y las pérdidas familiares a lo largo de su vida
Cabe mencionar que la vida del artista ha estado marcada por varias tragedias, 2015 fue uno de los años más difíciles para el cantante, ya que perdió a su padre, hermano y sobrino en un corto período de tiempo. Morrison describió cómo esas pérdidas le quitaron el aliento espiritualmente y lo llevaron a dejar de creer en la bondad del mundo.
A esto se suma la pérdida de su esposa, con quien había contraído matrimonio en 2006 y con quien tuvo dos hijas, Elsie de 15 años y Ada-Rose de 5. Su relación empezó cuando ella rentó una habitación en la casa de la madre del artista en la cual se conocieron y quedó flechado, en el podcast White Wine Question el británico detalló que le cantaba canciones de Stevie Wonder para llamar su atención y robar su corazón.
A pesar de la ausencia de señales de actividad delictiva, el médico forense Roland Wooderson ha pedido posponer su presentación ante el juez con el fin de recabar información adicional del informe toxicológico.
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