¿Cuáles son las consecuencias de no aplicarse bloqueador solar a diario?

Es costumbre que cuando salimos de vacaciones usemos bloqueador solar en grandes cantidades en nuestra piel y en la de nuestros hijos para evitar quemarnos al estar expuestos al sol por largos periodos de tiempo.

¿Por qué debemos usar bloqueador a diario?

Sin embargo, cuando estamos en nuestro lugar de vivienda optamos por no aplicarnos bloqueador a diario, ya sea porque vivimos en una ciudad fría o porque pasamos la mayor parte del tiempo desde casa.

Pero esta práctica puede ser perjudicial para nuestra piel, ya que, al no usar protector solar dejamos nuestra piel expuesta a diferentes rayos de luz artificial o natural, la más peligrosa la radiación ultravioleta, la cual, si no se contrarresta adecuadamente, puede ocasionar terribles efectos.

No usar protector solar puede acelerar el fotoenvejecimiento

Uno de los principales problemas que puede provocar es el fotoenvejecimiento, causando la aparición de arrugas, líneas de expresión en la frente, ojos y boca, así como manchas oscuras y la pérdida de tono y textura en la piel.

Además, los rayos UVA pueden acelerar el proceso de descomposición del colágeno, componente vital para la fortaleza y elasticidad cutánea.

La penetración de estos rayos en la dermis puede ocasionar una acumulación anormal de elastina, lo cual a su vez propicia la rotura del colágeno por enzimas.

La exposición al sol sin una protección adecuada también puede favorecer la aparición de radicales libres y quemaduras solares. Estas últimas son causadas por la degradación del ADN en las células de la piel.

Sin embargo, el daño más grave que puede causar la radiación ultravioleta es el cáncer de piel. El melanoma, el carcinoma de células basales y el carcinoma de células escamosas son los tres tipos principales de cáncer de piel metastásico y de rápida propagación que pueden desarrollarse debido a la falta de protección solar.

¿Qué tipo de bloqueador es el adecuado para mí?

Dadas todas estas consecuencias perjudiciales, el uso del protector solar se vuelve indispensable. Existen dos tipos principales: el físico y el químico.

Los filtros solares físicos, que contienen óxido de zinc u óxido de titanio, reflejan la luz solar y son especialmente recomendados para aquellas personas con piel sensible. Por otro lado, los protectores solares químicos, que contienen avobenzona u oxibenzona, son capaces de absorber los rayos UV y descomponerlos a través de enlaces químicos.

Ante todo, es fundamental tomar conciencia de los riesgos que implica una incorrecta protección solar. Mantenernos constantes en la aplicación del protector solar, especialmente durante las épocas de mayor exposición al sol, nos ayudará a mantener nuestra piel sana y protegida de los efectos nocivos del astro rey.

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