¿Por qué duele el pecho de improvisto? Esto explican los expertos

En ocasiones, identificar la causa del dolor en el pecho puede resultar complicado, ya que puede estar relacionado con el corazón u originarse por otras razones. Sin embargo, existen síntomas que son menos comunes en los problemas cardiacos, como, por ejemplo: 

- Sensación de acidez o sabor amargo en la boca, similar al reflujo de alimentos. 
- Variación en el dolor al cambiar de posición. 
- Dolor que empeora al respirar profundamente o al toser. 
- Sensibilidad al presionar en el pecho. 
- Persistencia del dolor por varias horas. 

Así se reconocen los tipos de dolores en el pecho  

Es importante destacar que los síntomas clásicos de la acidez estomacal también pueden estar relacionados con problemas cardíacos o del estómago. 

Ante la presencia de un nuevo dolor en el pecho sin causa aparente, o en casos de sospecha de un ataque cardíaco, es primordial llamar inmediatamente al número de emergencia o solicitar asistencia médica urgente. Ignorar los síntomas de un ataque cardíaco puede ser peligroso. Si no se cuenta con una ambulancia o vehículo de emergencia, se debe pedir ayuda a un vecino o amigo para dirigirse al hospital más cercano. En caso de absoluta necesidad, se puede manejar hacia el hospital por cuenta propia. 

Es importante mencionar que existen múltiples causas posibles para el dolor en el pecho y todas ellas requieren atención médica. 

Entre las causas relacionadas con el corazón se incluyen: 

1. Angina de pecho: esta condición se caracteriza por la obstrucción del flujo sanguíneo al corazón debido a la acumulación de placas en las arterias que lo alimentan. Esto puede provocar dolor en el pecho durante la actividad física. 

2. Ataque cardíaco: el bloqueo del flujo sanguíneo al músculo cardíaco, generalmente por un coágulo, puede dar lugar a un ataque cardíaco. La angina de pecho puede ser uno de los síntomas principales. 

3. Disección aórtica: esta afección potencialmente mortal afecta la principal arteria que surge del corazón, conocida como aorta. Si las capas internas de la arteria se separan, la sangre puede filtrarse entre ellas y ocasionar la ruptura de la aorta. 

4. Pericarditis: inflamación de la membrana que rodea el corazón, causando un dolor punzante que se intensifica al respirar o al estar acostado. 

Asimismo, el dolor en el pecho puede estar relacionado con trastornos del sistema digestivo, incluyendo: 

1. Acidez estomacal: se caracteriza por una sensación de ardor detrás del esternón y ocurre cuando el ácido gástrico del estómago se introduce en el esófago, la vía que conecta la garganta al estómago. 

2. Trastornos de la deglución: problemas en el esófago que dificultan la capacidad para tragar, ocasionando dolor. 

3. Problemas en la vesícula biliar o el páncreas: cálculos biliares, inflamación de la vesícula biliar o del páncreas pueden generar dolor que se irradia al pecho. 

Las causas musculoesqueléticas que pueden generar dolor en el pecho  

1. Costocondritis: inflamación del cartílago que conecta las costillas con el esternón, originando dolor. 

2. Dolores musculares: enfermedades crónicas como la fibromialgia pueden causar dolor prolongado en los músculos del pecho. 

3. Lesión en las costillas: fracturas o hematomas en las costillas pueden ocasionar dolor en el pecho. 

Por último, se encuentran las causas relacionadas con los pulmones, como: 

1. Embolia pulmonar: obstrucción del flujo sanguíneo en una arteria pulmonar debido a un coágulo que puede comprometer el tejido pulmonar. 

2. Pleuresía: inflamación de la membrana que recubre los pulmones, provocando dolor en el pecho que se intensifica con la respiración o la tos. 

3. Colapso pulmonar: dolor agudo en el pecho que suele aparecer de manera repentina, acompañado de falta de aire. Se produce cuando el aire se filtra entre el pulmón y las costillas. 

4. Hipertensión pulmonar: presión arterial elevada en las arterias pulmonares, originando dolor en el pecho. 

Además, existen otras posibles causas de dolor en el pecho, como los ataques de pánico, que pueden generar miedo intenso acompañado de dolor torácico, dificultad para respirar, sudoración excesiva, náuseas, mareos y temor a morir. A veces es difícil diferenciar entre un ataque cardíaco y un ataque de pánico, por lo que siempre es recomendable buscar asistencia médica si se presentan dudas sobre la causa del dolor. 

Por otro lado, la culebrilla es también una causa de dolor intenso en el pecho, acompañada de una franja de ampollas que se extiende desde la espalda hasta la zona del pecho. 

Es necesario prestar atención a cualquier dolor en el pecho y buscar atención médica especializada para determinar su origen y recibir el tratamiento adecuado.