¿Qué son las pecas? Revelan detalles sorprendentes sobre tu piel
Las pecas, conocidas como “efélides”, son pequeñas manchas pigmentadas que aparecen en la piel.
La piel de la mayoría de las personas cambia con las estaciones: algunos notan más sequedad durante el invierno, otros perciben un enrojecimiento cuando llega la primavera y a otros les salen pecas en el verano. Aunque existen muchos productos formulados para tratar la sequedad y el enrojecimiento de la piel, no hay muchas opciones para evitar la aparición de nuevas pecas.
¿Por qué salen las pecas?
Un estudio publicado en la revista Pigment Cell & Melanoma Research descubrió que las pecas disminuyen con la edad y son más frecuentes en las mujeres. Esta investigación también confirmó que las pecas son más visibles después de habernos expuestos al sol, lo cual explica por qué se asocian a la llegada del verano.
Los investigadores han encontrado que su origen se encuentra en lo que llaman el "gen de las pecas". Un informe publicado en la revista Human Molecular Genetics confirmó que la presencia del gen del receptor de la melanocortina-1, también conocido como MC1R, y sus variantes son la principal razón genética por la que algunas personas desarrollan pecas.
No hay razón alguna para alarmarse, pero las personas que son más propensas a tener pecas deben tener en cuenta algunos detalles importantes. Por ejemplo, aunque la mayoría de las pecas son benignas, el gen MC1R también se ha asociado con un mayor riesgo de desarrollar cáncer de piel.
Si tienes pecas, significa que eres sensible al sol y debes extremar las precauciones
La mejor estrategia para protegerte consiste en limitar el tiempo de exposición al sol. Además de usar ropa que proteja la piel, es importante que utilices una loción con SPF de amplio espectro durante todo el año, fundamentalmente en las partes del cuerpo que están expuestas directamente a la luz solar.
Por último, es fundamental que prestes atención a los cambios que sufre tu piel y que hables con tu dermatólogo si las manchas tienen un aspecto anormal.
Cuando el melanoma maligno se detecta en las primeras etapas, casi siempre tiene cura. Por tanto, si te mantienes atento a la salud de tu piel, podrás absorber los rayos del sol sin preocupaciones.