Ana de nadie: la dura despedida de Joaquín y su hijo Teo

Joaquín ha tomado la decisión más dura de toda su vida, dejar a su hijo. Y aunque confía en Magdalena de que solo será por una semana y que será el niño quien decida su futuro, muchas de estas cosas no se saben si pasarán y eso le hace más grande la herida. 

Y es que luego de que Joaquín aceptara que Magdalena se llevara al niño para Panamá, firmara papeles y más, y hasta diera su permiso y confiara en ella. Se enteró de muchas cosas que Magdalena ya veía haciendo a sus espaldas y tiene dudas.  

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Joaquín fue al colegio por su hijo y se enteró de que su mamá había congelado el año porque no sabía la fecha de regreso de él. También se enteró de que la pareja de Magdalena ya está en Panamá, pero buscando apartamento y viendo la ciudad. Además, que ella ya estaba comprando tiquetes y que no llevaba una sola maleta del niño sino varias.  

Joaquín se las juega por su hijo Teo 

Todo esto le generó dudas a Joaquín, pero las cartas ya estaban echadas, por eso no le dijo nada a su expareja, la dejó irse con su hijo, pero lo que sí pudo hacer fue una promesa con él de que se iban a volver a ver. Incluso, Teo le deja saber que solo será una semana y que él ya decidió quedarse con él, su papá. 

Eso lo emocionó, pero igual su corazón se partió en mil pedazos cuando lo vio en el taxi yéndose a una distancia muy larga de él. Pero lo que pensó Joaquín es que el tiempo pasa muy rápido y que su hijo volvería pronto.  

Le pidió a Magdalena que le avisara al legar al aeropuerto, pero ella le dijo que mejor cuando llegaran a apartamento, esto le generó más disgusto a Joaquín, pero no quiso hacer más ccomentarios sobre esta situación. Sin embargo, dejó claro que estará muy al pendiente de su hijo.  

Las esperanzas de Joaquín hasta que regrese su hijo  

Joaquín se quedó sin su compañero, sin su gran amigo y de inmediato llamó a Ana para contarle cómo se sentía. Ella le dio ánimos y hasta le aseguró que se verían más tarde para cambiarle la cara a esta dura situación. Él amó ese plan y le dijo que con su ayuda el tiempo iba a pasar más rápido y así dentro de poco sería feliz de nuevo.  

Lo cierto es que Magdalena no quiere perder a su hijo y no se sabe cuánto le deje decidir a él sobre su propio futuro, porque ella no va a dejar que Joaquín lo tenga al cien por ciento y mucho menos ella estando tan lejos, pues decidió irse del país con su nueva pareja.

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