“Me puse a llorar”, Elizabeth Loaiza sobre su proceso de lactancia con su bebé
La modelo narró lo difícil que ha sido este proceso con su pequeña, pero detalló cómo lo ha afrontado.
Elizabeth Loaiza sobre su maternidad (Tomada de Instagram: @elizabethloaiza)
La modelo Elizabeth Loaiza se sinceró con sus miles de fanáticos sobre el tema de la lactancia tras el nacimiento de su hija Mía, fruto de su relación con el empresario Juan Pablo Benavides.
Te puede interesar: Elizabeth Loaiza en seis días recordó lo difícil de la maternidad
A través de su cuenta de Instagram, donde tiene más de dos millones de seguidores, la caleña compartió un carrusel con varias fotografías junto a la bebé tomando el sol.
Elizabeth Loaiza se confesó sobre su proceso de lactancia
Allí quiso hablar sobre lo difícil que ha sido su proceso de lactancia con su bebé.
“Dicen que la lactancia no debe doler, pero ¿es verdad?.
Dios mío, me han escrito muchísimas mamás y me han enviado hasta fotos de sus pezones destrozados, en carne viva literal y yo soy fiel ejemplo de que a algunas SIIII NOS DUELE y mucho.
Antier vino la asesora de lactancia a casa y me recomendó dejar de dar teta durante dos días y aplicarme unas cremas. A veces no solo basta el buen agarre del bebé, sino que intervienen otros factores como el frenillo, la ubicación de los maxilares hacia adentro o hacia afuera, la lengua, los pezones de la mamá, etc.
La lactancia materna es más complicada y difícil de lo que parece, pero genera un vínculo hermoso con nuestro bebé”, escribió.
También narró uno de los episodios más complejos que ha vivido hasta el momento.
“Ayer cuando cargaba a Mía, ella lloraba desesperada y volteaba la cabeza hacia la teta, estaba desconsolada, llorando a gritos. La verdad yo me sentí impotente por no poderle meter la teta a la boca y calmarla. Esa impotencia terminó en llanto, también me puse a llorar. Me sentía súper súper mal.
Hoy amaneció uno de los pezones mejor que el otro y ya mañana puedo empezar a amamantar otra vez.
Mientras tanto me seguiré extrayendo la leche y dándosela en tetero.El papá prefirió el tetero que la cuchara tetero que porque se le regaba mucho y pues yo no me opuse. A la mayoría de nosotros nos criaron a punta de tetero sin tanta vaina”, contó.
Sin embargo, confesó otros datos de cómo ha ido afrontando esta situación.
“P.D.: Las mamás somos sabias. Ahora hay muchísimos estudios de lo que sirve y de lo que no. Además de todos los conocimientos de las abuelas.
Consejo, sigue tu instinto materno, agarra de todoooooooo lo que te digan, lo que consideres y el resto déjalo pasar sino te enloqueces con tanta información y de todo el mundo opinando.Los bebés vienen sin manual y todos sobrevivimos a punta de consejos de las abuelas”, dijo.