¿Sabías que la arena de la playa contiene muchos microorganismos y parásitos?
La OMS advirtió sobre los peligros ocultos que se encuentran en la arena de la playa debido a varios microorganismos y parásitos.
La arena de la playa puede causar problemas gastrointestinales y otras enfermedades. (Foto: @kireyonok_Yuliya en Freepik)
La arena de la playa puede albergar más que solo conchas y diversión. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), diversos estudios han demostrado que hay microorganismos presentes en la arena que pueden causar enfermedades gastrointestinales y otros problemas de salud.
A pesar de que la mayoría de estos microbios son inofensivos, es importante tomar precauciones para evitar riesgos innecesarios durante las vacaciones.
¿Qué bacterias y microorganismos que se encuentran en la arena de la playa?
La presencia de bacterias y parásitos en la arena se debe, en gran parte, a la acción humana. Dejar basura en las playas o no recoger las heces de los perros favorece la proliferación de estos microorganismos, especialmente en las áreas cercanas a las olas.
Algunas de las bacterias y parásitos más comunes encontrados en la arena son la Escherichia coli, el Enterococcus, la Salmonella y el Campylobacter, los cuales pueden causar gastroenteritis o problemas estomacales como náuseas, vómitos y diarrea.
Otro microorganismo preocupante es el parásito conocido como toxocara. Este parásito, que suele vivir en el intestino de animales como gatos y perros, puede infectar a las personas a través del contacto con la piel al caminar o tumbarse en la arena contaminada con heces de animales infestados. Sin embargo, este parásito suele desaparecer del organismo humano en pocos días, ya que no encuentra un entorno óptimo para reproducirse.
¿Qué peligros se puede encontrar en la arena de la playa?
Además de los microorganismos, hay otros peligros que se pueden encontrar en la arena de la playa. Por ejemplo, la bacteria Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (SAEM), que puede causar infecciones cutáneas y es resistente a algunos antibióticos.
También se pueden encontrar hongos como el Trichophyton mentagrophytes y el Trichophyton rubrum, responsables de afecciones cutáneas como el pie de atleta o la tiña.
La Organización Mundial de la Salud ha encontrado incluso la presencia de gusanos causantes de toxocariasis en algunas playas, como en Marsella. Estos gusanos pueden causar enfermedades como fiebre, dolores musculares y tos, y en casos más graves, daños en la retina si infectan los ojos.
Aunque los riesgos de contraer una infección a través de la arena de la playa son similares a los de otros entornos, es importante seguir algunas recomendaciones para garantizar unas vacaciones tranquilas y evitar problemas de salud.
Algunos consejos incluyen el uso de toallas o esterillas para evitar el contacto directo con la arena, evitar que los niños se sienten desnudos sobre la arena, evitar playas con presencia de perros o gaviotas, no cavar con las uñas para evitar la acumulación de arena en ellas y ducharse antes y después de ir a la playa para eliminar cualquier microorganismo presente en la piel.
Disfrutar de unas vacaciones en la playa es maravilloso, pero es importante estar informado sobre los posibles peligros que pueden ocultarse en la arena. Tomar precauciones y seguir las recomendaciones puede ayudar a evitar sustos que arruinen las tan ansiadas vacaciones.
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