La fresa: un aliado natural para reducir la grasa y el acné
La fresa, además de ser deliciosa y fácilmente accesible, posee grandes beneficios para el cuidado de la piel.
Los beneficios de la fresa para el cuidado de la piel. (Foto de Lucinda Hershberger en Unsplash)
La grasa y el acné son problemas comunes en la piel, y si no se tratan con la atención necesaria pueden dejar cicatrices que afectan la apariencia y la autoestima de las personas. Es por esto que encontrar un ingrediente natural y accesible para combatir estos problemas es de gran importancia.
Según expertos en el cuidado de la piel, la fresa, además de ser deliciosa y fácilmente accesible, posee grandes beneficios para nuestra dermis, pues sus propiedades antioxidantes la convierten en una aliado para ayudar a protegerla de los radicales libres, evitando el envejecimiento prematuro y promoviendo una apariencia más joven y saludable.
Conozca los beneficios de la fresa para la piel
Asimismo, la fresa cuenta con propiedades exfoliantes, lo que significa que ayuda a eliminar las células muertas de este órgano, desobstruyendo los poros y evitando la acumulación de sebo que puede dar lugar a la formación de granos y espinillas.
Además, se ha demostrado que la fresa también posee propiedades antiinflamatorias, lo que contribuye a reducir la inflamación y enrojecimiento causados por los granos que salen en la mayoría de las veces en el rostro.
Pero eso no es todo, según El Heraldo USA, la fresa también ayuda a mejorar el pH de la piel, equilibrándolo y evitando el exceso de grasa que puede llevar a la aparición de más imperfecciones.
¿Cómo aprovechar las propiedades de la fresa para el cuidado de la piel?
Cabe resaltar que los descubrimientos sobre las bondades de esta frutan se basan en el uso tópico de la fresa, es decir, aplicándola directamente sobre la piel en forma de mascarilla o frotándola suavemente en las zonas afectadas.
Así mismo, se recomienda que para ver los beneficios de este poderoso alimento, se puede hacer la siguiente preparación: mezclar dos cucharadas de yogur natural, dos cucharadas de la pulpa de unas fresas frescas, una cucharadita de maicena y un poco de miel.
Después, cuando se consiga una pasta homogénea se debe aplicar sobre el rostro, y se deja actuar por 15 minutos, para finalmente, retirar con agua tibia. Se aconseja realizar el procedimiento una o dos veces por semana para ver resultados efectivos en el cutis.
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