¡Ojo! Esta es la razón por la que los bebés no deben tomar miel

En un reciente comunicado, expertos en pediatría han advertido sobre la importancia de no dar miel a los bebés menores de un año de edad. Esta recomendación se basa en la presencia de una bacteria conocida como Clostridium, la cual puede causar el botulismo del lactante, una enfermedad grave que afecta al sistema muscular de los pequeños.

¿Qué es el botulismo y cómo afecto a los bebés?

El botulismo del lactante se caracteriza por debilidad muscular y presenta síntomas como dificultad en la succión, llanto débil, estreñimiento y falta de tono muscular. La bacteria Clostridium se encuentra comúnmente en la miel, por lo que se ha establecido una prohibición en su consumo para los bebés menores de un año.

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Los padres juegan un papel fundamental en la prevención de esta enfermedad en sus hijos. Además de evitar darles miel, se les recomienda no ofrecer ningún alimento que contenga miel en su procesamiento, como las galletas de trigo integral con miel. Incluso el almíbar de maíz, tanto espeso como ligero, puede contener bacterias que podrían causar el botulismo, por lo que se aconseja consultar al médico antes de proporcionárselo al bebé.

¿En qué edad es recomendable darles miel a los niños?

Es importante destacar que, una vez que los niños superan el año de edad, su sistema digestivo está más maduro y pueden consumir miel sin riesgo de botulismo. A esta edad, su organismo es capaz de eliminar las esporas de la bacteria Clostridium antes de que puedan causar daño alguno.

Para evitar la aparición de la enfermedad, te aconsejamos:

• Lavar y cocinar adecuadamente todas las verduras que suministres al bebé.
• No le proporciones alimentos que la contengan como algunas verduras, las especias, las hierbas, los tés y la miel. 
• Mantén sus manos adecuadamente higienizadas.
• Controla que no se lleve a la boca alimentos que hayan estado en contacto con la tierra.

En conclusión, los expertos en pediatría enfatizan la importancia de no dar miel a los bebés menores de un año. Esta medida busca proteger a los más pequeños de la bacteria Clostridium y prevenir el botulismo del lactante. Ante cualquier duda o consulta, se recomienda siempre buscar el consejo médico adecuado.