Por esta razón no debes retirar la piel muerta provocada por quemaduras del sol

Las quemaduras solares representan un riesgo significativo para la salud de la piel y el bienestar general. Estas quemaduras no solo son dolorosas y desagradables, sino que también pueden tener efectos a largo plazo, como el envejecimiento prematuro de la piel y un aumento en el riesgo de cáncer de piel.

Además de la incomodidad inicial y el dolor, las quemaduras solares a menudo causan la descamación de la piel, lo que indica daño en las capas superficiales. Por lo tanto, es fundamental tomar medidas preventivas, como el uso de protector solar y la limitación de la exposición al sol, para evitar las quemaduras solares y sus efectos perjudiciales en la piel.

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¿Qué le sucede a nuestra piel cuando se quema por los rayos del sol?

La dermatóloga Natalie Curcio, dermatóloga certificada por la junta que ejerce en Nashville, explica que una quemadura solar ocurre después de una exposición excesiva a la radiación ultravioleta B del sol, lo que provoca una reacción tóxica en la piel.

La extensión de la quemadura depende del tipo de piel y la cantidad de rayos UV recibidos. Las quemaduras solares de primer grado afectan la capa más externa de la piel y sanan en unos pocos días. Por otro lado, las quemaduras solares de segundo grado son más graves, afectando la capa más profunda de la piel y tardando más tiempo en sanar.

¿Cómo aliviar el dolor ocasionado por las quemaduras solares?

Cuando la piel comienza a pelarse, es un signo de que el cuerpo está desechando las células dañadas. Para aliviar el dolor, se recomienda tomar duchas o baños fríos y tomar ibuprofeno o aspirina. La hidratación con productos a base de aloe vera o soja ayuda a calmar la piel quemada, pero se debe evitar el uso de cremas a base de petróleo u otras cremas aceitosas. Además, es importante beber agua extra para evitar la deshidratación.

La dermatóloga aconseja no exfoliar la piel descamada y permitir que se desprenda por sí sola, ya que la descamación suele detenerse cuando la quemadura se ha curado. También es fundamental proteger la piel del daño adicional de los rayos UV, usando ropa protectora y evitando la exposición al sol durante las horas pico.

Es importante recordar que la prevención es la clave para evitar estos problemas, por lo que se recomienda proteger la piel de los rayos nocivos del sol en todo momento.

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