La exigente Lorena no es una mujer fácil de convencer

Lorena Maldonado (Manuela González) es una mujer exigente y rígida, que ha sacado adelante el Instituto de la niñez, organización que dirige con responsabilidad y dedicación, pues considera que su rol de buscar el bienestar de niños y jóvenes no puede pasar por alto.

No obstante, pese a mostrar una figura de autoridad imponente, dejando claro que su vida personal está apartada de lo profesional, Gustavo (Rodrigo Candamil) es su talón de Aquiles, pues con él se muestra más desinhibida y pasional, ya que considera que él es el hombre perfecto para su vida.

Lorena mantiene en la intimidad su relación con Gustavo

Siempre ha considerado su trabajo una parte importante en su desarrollo laboral; no obstante, tener a Gustavo en su vida, también le brinda esa parte sensible que se necesita para entender el valor de buscar una familia apropiada para los niños que tiene bajo su custodia.

Por ello, su relación con Gustavo le ha brindado la seguridad que necesita, además, no ha dado motivos para que sospechen en el trabajo que los dos mantienen una unión sentimental. No obstante, su discreción llegará a un punto de no retorno.

La presencia de Alison genera inseguridades en Lorena

Si bien Lorena había logrado tener su relación en la extrema intimidad, nuevos acontecimientos la obligan a perder la discreción, sobre todo si se trata de Gustavo, a quien ve como el hombre perfecto.

Aunque no parezca, a Lorena le interesa demasiado su trabajo y los casos que suceden dentro de ello, por lo que lo sucedido con Olga y sus hijos, la llevan a garantizar el mejor de los cuidados; pero para Gustavo, este caso supera su interés netamente profesional.

Y es que, con la llegada de Alison (Juliette Pardau) y sus sobrinos, Gustavo ha comenzado a interesarse más en su historia y lo que sucede alrededor de ellos, provocando en la exigente Lorena una amenaza a su relación y su estabilidad en general.