El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y condiciones. Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar la experiencia del usuario a través de su navegación. Si continúas navegando aceptas su uso. Políticas de cookies
Por eso cuando Nuncia puso sus ojos en él no dudo en tener un hijo con él, y de ahí en adelante, cuando ella decidió casarse con él, hizo lo que a bien tuviera la señora mandar.
El Ñato siempre ha anhelado derrotar a Domingo, ‘el macho’. Envidioso y pusilánime, el Ñato siempre será uno de aquellos que se arrima al árbol que mejor sombra da.