Vestuarista de 'Betty, la fea’ revela cómo iba a ser la verdadera Beatriz Pinzón
Gaitán tenía una idea sobre cómo sería este personaje que fue transformada por la que conocemos hoy en día.
Rosita Cabal, vestuarista de Yo soy Betty, la fea y encargada en gran medida de la vestimenta de Ana María Orozco en la producción, reveló cómo se tenía pensado, en el inicio, el personaje de Beatriz Pinzón.
Y es que el libreto original de Yo soy Betty, la fea se refería a que Beatriz debía ser una mujer gordita y, para embellecerla, debía someterse a una liposucción.
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“Gaitán era muy incluyente, él preguntaba mucho y le gustaban mucho las opiniones. Recogía siempre los comentarios de todas y existía la posibilidad de que Betty fuera gorda para después embellecerla, pero en el intelecto de Betty creo que jamás existió la posibilidad de que ella se sometiera a una “lipo-nada” para ser bonita”, recuerda Rosita.
Y es que efectivamente para una mujer como “Emperatriz”, como le diría Armando justo cuando la conoció, la belleza no era relevante para ella, razón por la cual no contemplaba la posibilidad de un cambio en su forma de vestir, llevar el cabello e, incluso, lucir las gafas:
“Nunca tampoco pensó en tener una transformación porque eso a ella no le interesaba, ella era en sus números, en su cabecita que era perfecto porque además a ella no le interesaba estar en ese cuartucho donde estuvo siempre.
No aspiraba a nada más aparte de cumplir como con su trabajo y ser la mejor y lograr pues que don Armando pudiera salir de los rollos en los que se metió y eso”, asegura la talentosa mujer.
Y es que efectivamente para Gaitán era muy importante la opinión de cada uno de los miembros de la producción, razón por la cual solía comentar algunas de las ideas que tenía para las escenas y, de esta forma, hacer un trabajo mucho más colaborativo con los otros.
No cabe duda de que esta gran historia llegó a alcanzar el éxito no sólo nacional, sino también internacional, siendo adaptada en varios países quienes se devoraban, ansiosos, la historia de Beatriz y don Armando.
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